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Si bien no necesitamos razones para amar el chocolate, es cierto que este puede ser un placer culposo, pues mucho se ha dicho sobre él que resulta ser falso o impreciso, y muchas verdades sorprendentes y desconocidas, quedan ocultas.
Pero después que desmitifiquemos juntos el chocolate, vas a querer comerte uno inmediatamente, así que ve pensando qué se te antoja.
Antes de leer la respuesta, medita tu respuesta y compara lo que sabes y desconoces sobre el maravilloso chocolate.
¡Falso! Una barra de chocolate de 1.4 onzas contiene seis miligramos de cafeína. Eso es equivalente a la cafeína en una taza de café descafeinado. Así que si te desvelas, no habrá sido por el chocolate que te comiste.
¡Verdadero! El chocolate es la única sustancia comestible que se derrite alrededor de los 34°C o 93°F, justo por debajo de la temperatura del cuerpo humano. Es por eso que el chocolate se derrite tan fácilmente en tu lengua.
¡Falso! La grasa principal en el chocolate se llama ácido esteárico, el componente principal de la manteca de cacao y lo que le da al chocolate la capacidad de = derretirse en tu boca que mencionamos anteriormente. La ciencia demuestra que no aumenta el colesterol malo (LDL). De hecho, comer una cantidad moderada de chocolate, podría aumentar el colesterol bueno (HDL). Recuerda que la salud es la suma de hábitos, y el chocolate de buena calidad y en moderación, encaja perfectamente en una vida sana.
¡Verdadero… más o menos! El chocolate negro proviene del grano de cacao, que crece en el árbol de cacao (Theobroma cacao), una planta de hoja perenne de la familia Malvaceae (otros miembros de la familia incluyen los molondrones y el algodón). Esto hace que la parte más importante de tu delicia favorita sea un vegetal, pero no creo que debas contar esa barra que te vas a comer como un servicio de ensalada.
¡Falso! El chocolate es uno de los postres más nutritivos que puedes comer, pues es rico en magnesio, cobre, hierro y zinc. Recuerda que el chocolate contiene flavonoles, y se ha demostrado que estos contienen propiedades antioxidantes que pueden combatir el cáncer.
¡Verdadero! A pesar de su popularidad y abundancia, ¡los granos de cacao no se convierten mágicamente en chocolate! se necesitan alrededor de 400 granos para hacer una sola libra de buen chocolate, y un chocolatier necesita de dos a cuatro días para hacer una barra de chocolate (que luego te comes en minutos).
El chocolate es un acto de paciencia y amor, pues un agricultor debe esperar de cuatro a cinco años para que un árbol de cacao produzca sus primeros granos.
¡Falso! Las caries se forman cuando las bacterias presente en la boca fermentan los restos de alimentos azucarados y almidonados, lo que acidifica la boca, pudiendo causar caries. El chocolate no causa caries, el exceso de dulces y una pobre higiene dental sí. Así que come chocolate sin preocuparte, solo recuerda lavarte bien los dientes antes de dormir.
¡Verdadero! Así que mantenlo bien sellado si no te lo vas a comer todo de una vez. El chocolate es como una esponja y absorberá cualquier aroma a su alrededor, así que si lo tienes en tu cartera al lado de un paquete de chicle de menta, tendrás chocolate con menta. Si lo pones en tu nevera al lado del queso, tu chocolate podría saber un poco a gruyere o parmesano, así que recuerda guardarlo bien, comértelo todo o compartirlo.
El chocolate blanco no es chocolate de verdad
¡Mmmm, impreciso! El chocolate blanco no se considera chocolate en el más estricto sentido de la palabra porque carece de los sólidos de cacao que le dan al chocolate su sabor y color característicos, pero sí contiene la parte grasa del grano de cacao, la manteca de cacao, que le da al chocolate su textura suave. La manteca de cacao se combina con ingredientes como azúcar, sólidos lácteos y vainilla para crear barras deliciosas y aromáticas de chocolate blanco.
Y antes de pensar que el chocolate blanco es un producto inferior con toneladas de aditivos, recuerda que habemos chocolateros que creamos chocolate blanco tan delicioso, que es digno de llevar el nombre.
¡Falso! Ese proceso especial es el templado, una parte importante de la creación del buen chocolate.
Durante el templado, el chocolate se eleva y se baja a temperaturas específicas para que los cristales en la manteca de cacao se alineen de una manera precisa. Esto resulta en el brillo y firmeza característico cuando está en tu mano, y en la suavidad con que se derrite cuando está en tu boca.
El chocolate mal templado tiene un acabado mate y sin cuerpo, por lo que podemos decir que el buen chocolate es el balance perfecto entre ciencia, historia y naturaleza.
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